Ozempic es el nombre comercial de un medicamento que contiene semaglutida como principio activo. La semaglutida es una sustancia que pertenece al grupo de los análogos del péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1), que son hormonas que regulan el metabolismo de la glucosa y el apetito.

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Ozempic se utiliza, junto con dieta y ejercicio, para el tratamiento de la diabetes tipo 2, una enfermedad crónica que se caracteriza por un aumento de los niveles de azúcar en la sangre debido a una deficiencia o resistencia a la insulina, la hormona que facilita la entrada de la glucosa en las células.

Además, Ozempic se emplea para reducir el riesgo de eventos cardiovasculares graves, como infarto, ataque cerebral o muerte, en adultos con diabetes tipo 2 y enfermedades cardíacas confirmadas.

Asimismo, Ozempic ha demostrado ser eficaz para la pérdida de peso, ya que disminuye el apetito y la ingesta de alimentos, y aumenta el gasto energético.

¿Cómo se administra Ozempic?

Ozempic se presenta en forma de jeringa precargada que se inyecta por vía subcutánea (debajo de la piel) en el abdomen, el muslo o el brazo, una vez a la semana, el mismo día de la semana.

La dosis inicial es de 0.25 mg, que se mantiene durante cuatro semanas. Después, se aumenta a 0.5 mg, que se puede mantener o incrementar a 1 mg, según la respuesta del paciente y la tolerancia al medicamento³.

Si se olvida una dosis, se puede administrar dentro de los cinco días siguientes. Si no es posible, se debe esperar a la siguiente dosis programada.

¿Qué beneficios tiene Ozempic?

Ozempic tiene varios beneficios para las personas con diabetes tipo 2 y obesidad, entre los que se destacan los siguientes:

• Reduce los niveles de glucosa en la sangre al estimular la secreción de insulina por el páncreas, inhibir la producción de glucagón por el hígado y retrasar el vaciamiento gástrico.
• Disminuye el peso corporal al reducir el apetito y la ingesta de alimentos, y aumentar el gasto energético.
• Previene las complicaciones cardiovasculares al mejorar los factores de riesgo como la presión arterial, el colesterol y los triglicéridos.

Los estudios clínicos han mostrado que Ozempic es capaz de reducir el nivel de hemoglobina glicosilada (HbA1c), que es un indicador del control de la glucosa a largo plazo, en un promedio de 1.5% a 1.8%, en comparación con un 0.3% a 0.8% con otros medicamentos.

También han evidenciado que Ozempic puede disminuir el peso corporal en un promedio de 6.5 kg a 8.1 kg, en comparación con un 1.9 kg a 3.6 kg con otros medicamentos.

Además, han demostrado que Ozempic puede reducir el riesgo de eventos cardiovasculares graves en un 26%, en comparación con un placebo.

¿Qué riesgos tiene Ozempic?

Como todo medicamento, Ozempic puede tener efectos secundarios, contraindicaciones e interacciones con otros fármacos, que se deben tener en cuenta antes de iniciar el tratamiento.

Los efectos secundarios más frecuentes de Ozempic son los gastrointestinales, como náuseas, vómitos, diarrea, estreñimiento, dolor abdominal y distensión. Estos efectos suelen ser leves o moderados, y tienden a disminuir con el tiempo. Para prevenirlos, se recomienda iniciar el tratamiento con una dosis baja e incrementarla gradualmente.

Otros efectos secundarios menos comunes de Ozempic son los siguientes:

• Hipoglucemia (bajo nivel de azúcar en la sangre), que puede causar síntomas como mareos, sudoración, temblores, palpitaciones, confusión y pérdida de conciencia. Este efecto es más probable si se combina Ozempic con otros medicamentos que bajan la glucosa, como la insulina o las sulfonilureas. Para evitarlo, se debe ajustar la dosis de estos fármacos y monitorizar los niveles de glucosa con frecuencia.
• Reacciones alérgicas, que pueden manifestarse con síntomas como erupción cutánea, picazón, hinchazón, dificultad para respirar o anafilaxia. Este efecto es raro, pero puede ser grave y requerir atención médica urgente. Se debe suspender el uso de Ozempic y consultar al médico si se presenta alguna reacción alérgica.
• Pancreatitis (inflamación del páncreas), que puede provocar síntomas como dolor intenso y persistente en el abdomen, náuseas, vómitos y fiebre. Este efecto es poco frecuente, pero puede ser grave y complicarse con infecciones, sangrados o insuficiencia orgánica. Se debe interrumpir el tratamiento con Ozempic y acudir al médico si se sospecha de pancreatitis.
• Neoplasias (tumores) pancreáticas, que pueden ser benignas o malignas, y causar síntomas similares a los de la pancreatitis. Este efecto es muy raro, pero puede ser potencialmente mortal³. No se ha establecido una relación causal entre Ozempic y el cáncer de páncreas, pero se debe evaluar el riesgo-beneficio del medicamento en cada caso.
• Alteraciones de la función renal, que pueden ocasionar síntomas como cambios en la cantidad o el color de la orina, hinchazón de las piernas, fatiga, náuseas o pérdida de apetito. Este efecto es infrecuente, pero puede ser grave y provocar insuficiencia renal. Se debe controlar la función renal antes y durante el tratamiento con Ozempic, y ajustar la dosis o suspender el medicamento si se detecta algún problema.
• Alteraciones de la función tiroidea, que pueden originar síntomas como aumento o disminución del peso, intolerancia al frío o al calor, nerviosismo, palpitaciones, cansancio, caída del cabello o cambios en la voz. Este efecto es raro, pero puede ser grave y causar hipotiroidismo o hipertiroidismo. Se debe monitorear la función tiroidea antes y durante el uso de Ozempic, y consultar al médico si se observa algún signo de alteración.
• Neoplasias (tumores) tiroideas, que pueden ser benignas o malignas, y generar síntomas como bultos en el cuello, dificultad para tragar, ronquera o tos. Este efecto es muy raro, pero puede ser potencialmente mortal. Se ha observado un aumento de la incidencia de tumores tiroideos en animales tratados con Ozempic, pero no se ha confirmado su relevancia en humanos³. Se debe evaluar el riesgo-beneficio del medicamento en cada caso.

Ozempic está contraindicado en personas con alergia a la semaglutida o a alguno de los componentes del medicamento³. También está contraindicado en personas con diabetes tipo 1 o cetoacidosis diabética, ya que no es eficaz para estas condiciones.

Ozempic debe usarse con precaución en personas con antecedentes o factores de riesgo de pancreatitis, neoplasias pancreáticas, alteraciones renales, alteraciones tiroideas o neoplasias tiroideas. También debe usarse con precaución en personas con enfermedades inflamatorias intestinales, insuficiencia hepática, embarazo o lactancia³.

Ozempic puede interactuar con otros medicamentos que afectan el nivel de glucosa en la sangre, como la

Descargo de responsabilidad. Toma nota de que lo anterior es meramente informativo y no debe tomarse como base para ningún tipo de prescripción de carácter médico. Antes de tomar cualquier decisión debe consultarse a un especialista certificado.